
Entre los S. X al XV Venecia era la capital del azúcar, pero fue destronada por Lisboa. Durante los S. XVII y XVIII el consumo de azúcar creció sin cesar en el continente europeo.
Sin embargo, incidentes bélicos, en especial el ¦0¦ de 1806, a cambiaron esta supremacía por la remolacha azucarera, cuyas propiedades endulzantes habían sido descubiertas por Marggraf en 1744, en Berlín.
Napoleón, alentado por el proceso de elaboración industrial diseñado por un compatriota, Delessert, impulsó el cultivo de la remolacha.
Tuvo que suceder otro conflicto bélico, el mayor conocido hasta entonces por la humanidad, y por ello fue llamada la Gran Guerra, para que el azúcar recobrara su lugar preponderante.