Coloque el arroz en el bol grande, lávelo bajo el chorro de agua, moviéndolo continuamente con la mano, cambiando el agua hasta que salga limpia, es decir los granos no tengan más almidón.
Entonces, colóquelo en el tamiz y deje que se escurra toda el agua. Luego, viértalo en la olla de fondo grueso, tápelo herméticamente, si la tapa no calza bien coloque entremedio papel metálico.
Lleve a fuego máximo, hasta que comience a hervir, entonces, baje a mínimo y deje cocer hasta que el arroz absorba toda el agua. En total, unos 20 min. de cocción. Una vez pasado ese tiempo, retire del fuego y coloque la olla, sin destapar, encima de un paño húmedo, 5 min, para que continúe la cocción y no se pegue el fondo.
Mientras tanto, en la ollita vierta el vinagre, la sal, el azúcar y el mirin. Lleve a fuego bajo, a calentar hasta que el azúcar se haya disuelto. Retire y deje enfriar.
Cuando el arroz esté listo, colóquelo en el bol de plástico o madera, añadale el condimento, mezclándo con la espátula. Siga removiéndolo, continuamente, hasta que el arroz haya enfriado, si desea acelerar el proceso recurra a un ventilador o secador de cabello.
Este arroz se conserva refrigerado, con un paño húmedo colocado encima, en un recipiente tapado 3 días, aunque es conveniente utilizarlo en el momento pues es cuando tiene su textura ideal
